sábado, marzo 03, 2007

Mi cielo cae...

Hoy le dije a mabela que estoy cansada de vivir asi. Despertar un dia, y darte cuenta de que la historia se repite, hace que se le quiten a uno las ganas de seguir respirando. Siempre he pensado, que las cosas siguen repitiendose hasta que se aprende la leccion, pero... ¿cual es la leccion que no acabo de aprender?

Hace no mucho tiempo decidi que no queria seguir viviendo mi vida en funcion de un amor unidireccional, y me borre de esa historia. Y llego alguien, que con dulzura y encanto ha llenado mis dias de felicidad, pero siento que poco a poco estoy volviendo al mismo hueco.

Y yo pregunto ¿Es posible que el interes se pierda de una semana a otra? ¿Exactamente de cual punto es que estoy esperando demasiado?

Yo creo que si doy la vida me retribuye, lo que no se es hasta que punto debo dar, si existe un limite o si esto es acumulativo.

Me encantaria poder dejar de creer que se me ha caido el cielo, pero es que por mas que intento sostenerlo, se va bajando poco a poco y honestamente no se hasta cuando pueda sostenerlo.

1 comentario:

Chankleta dijo...

Marjo tu tienes razón en eso de la reincidencia en el ser humano; en uno que cree que cada historia es nueva y al final uno termina cayendo en el mismo lugar. Lo que hay que pensar es que si caemos, no es precisamente en un hoyo, ni porque relativamente sea "malo".

¿Porqué? sencillo.
La nieve cae, todos los años. En lugares más fuertes, poca o mucha cantidad, pero no porque el Sol salga más brillante, o del otro lado del mar, esa nieve deja de caer. Lo que hay es que comprar buenos abrigos, y tener de los ligeros, para cuando sea necesario cambiar de elección a la hora de saber que "abrigo" nos conviene más.
Va a sonar medio estúpido y muy fácil, pero todo en la vida es cuestión de decisión/actitud; aunque nos partamos la cabeza en pedazos como en sentimientos, y a uno le llega un momento, que no sabe si llorar o reir, o simplemente seguir en el camino.

De todas maneras esa reincidencia nos permite defender nuestros pensamientos, y alegar por la razón que muchas veces nos gana la partida.
Ultimamente he aprendido, que por más que querramos obviar cuando regalamos nuestro corazón, eso no podrá cambiar porque en esencia nosotras queremos a la buena, entonces innato es lo que sale de la naturaleza del corazón.
No dejes que alguna que otra particularidad te roben lo que eres, y no porque lo diga yo, sino porque siempre has sabido salir airosa de encontronazos como éstos. Que aunque es posible que la vulnerabilidad se esté jugando un bingo contigo, recuerda que el buen jugador nunca pierde, aunque no salga victorioso de la primera jugada.

Y nah...que te quiero muchísimo.
Que le agradezco a todo lo que ha pasado, por haberme brindado la oportunidad de compartir contigo incondicionalmente.

Tú sabes que estoy aquí!


MT//