Mi cuerpo, mi vida, estuvo en manos de los legisladores, que no son más que unos apasionados partidistas que luchan por sus intereses intragrupales. Qué bien que se vio que el aborto ha existido y va a seguir existiendo, pero que mal que entienda el presidente que un artículo tan restrictivo sea la "solución". ¿Acaso creen el presidente y los legisladores que se va a erradicar la práctica? permítanme dudarlo...
Lo que yo creo es lo siguiente:
Un gran número de los abortos que se practican, no se llevan a cabo solo porque son embarazos no deseados, sino por las deficiencias sociales, culturales, políticas, educativas. Cuantos de nuestros padres se toman el tiempo de hablar con los hij@s, no como padres, sino como seres humanos, sobre las implicaciones de el sexo sin protección, cuántos de ellos han sido suficientemente valientes como para entender, que no porque ellos no hablen del tema sus hij@s dejarán de tener relaciones sexuales? A mi juicio, pocos.
Recuerdo que cuando estaba en la secundaria, en 3er o 4to año, se inventaron las monjas una clase de educación sexual, que habría estado muy bien, si en cambio de Sor Sexo la habría impartido cualquier otra persona que tuviera una formación en la materia, que aunque defendiera la posición de la iglesia, pudiera educar sin tabúes... ¿Cuántos programas de educación sexual se han implementado en nuestro país? pocos. No solamente las niñas que viven en barrios marginados están desorientadas, las de clase media y alta también lo están, si no fuera así no habrían tantos matrimonios fugaces entre adolescentes que salen en los periódicos o que publican sus fotos en facebook, hi5 y todas esas revistas y redes sociales. La educación debe ser MASIVA, porque quien no está al tanto de las leyes (la mayoría de los adolescentes) no es consciente de si está penalizado o permitido el recurso que, en ninguna situación, será placentero.
Yo no estoy a favor del aborto, porque alguien salió una noche, cometió una estupidez y ahora no quiere tener un hijo de quien no tiene idea quién es, o porque hay una adolescente que no es suficientemente responsable para ser madre, o porque no dispones de los recursos de manera inmediata para hacerte cargo de la criatura. La terminación de un embarazo no es un juego, no es una decisión que se toma lanzando al aire una moneda. Pero que va a pasar si un embarazo representa una amenaza para la vida de la madre, debe seguir adelante con el embarazo y echar su vida a la suerte porque las leyes se lo imponen, a pesar de que podría tener uno o más embarazos saludables? Que va a pasar si se han detectado anomalías severas e irreversibles en el sistema nervioso central. Si a una madre le explican que el o la bebé que lleva dentro una vez que nazca no va a tener un desarrollo normal y que pasará la mayor parte de su vida en estado vegetativo, posiblemente decida tenerlo, amarlo, cuidarlo, no lo sabemos. Pero entiendo que decidir si quiero dar vida aunque eso signifique perder la propia, o si quiero tener un bebe que no va a tener oportunidad de vivir, es un derecho que no puede ser negociado.
Me cuesta creer que el presidente y los legisladores realmente estén convencidos de que imponiendo restricciones de esa naturaleza se va a erradicar una situación más complicada que el hecho de si se permite o no. Me cuesta todavía más creer que un país pobre como el nuestro, no haya visto el atraso que esta medida supone. ¿No quieren que haya abortos? Desarrollen programas de control de la natalidad.
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