Si cuando mires hacia el frente no puedes encontrar aquello que buscas, busca dentro de ti. Escudriña por los bosques de tu mente, de tu corazón, de tus entrañas y de tu sangre si cabe decir.
Nunca nada nos resultó imposible, sino poco atractivo como para esforzarnos más. Piensa, que a lo largo de la vida, las experiencias nos fortalecen, siempre que aprendamos lo que nos toca, que sepamos aprovecharlas. Por un río nunca pasa dos veces la misma gota de agua, asimismo nosotros, aunque parezca que somos los mismos, somo diferentes. Aunque nos parezca que estemos viviendo las mismas experiencias, o que estamos con una misma persona, no es así, no debe ser así.
Cuida de tu salud, pues de nada nos sirve aprender cuantas cosas sean posibles si la vida no nos permite enseñarlas a los demás.
Aprende a compartir. Hasta el hambre, si se pasa acompañado, es menos. El dolor, las alegrías se intensifican, se hacen más fuertes, más llevaderos cuando alguien puede ser feliz con nosotros, o puede consolarnos en la tristeza.
Se feliz, como nunca antes nade más lo fue. Disfruta cada momento de tu vida, cada persona que esta a tu alrededor puede aportarte. Puede enamorarte, excitarte, cautivarte, hacerte más conocedor de las cosas de la vida, hacerte descubrir algo en ti que desconocías.
Apégate a lo importante. Establece prioridades, escoge las cosas que te hagan bien, hazlas, pero nunca dejes nada para después si puedes hacerlo ya. Hay cosas, como el amor, que con el paso del tiempo bien se intensifican o se debilitan. Y eso, el amor, es la razón por la que a fin de cuentas existimos todos.
Ahora no sabemos a donde vamos, pero en el trayecto es posible que lo descubramos..
Un beso.
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